El implante cigomático es una opción para rehabilitación con prótesis fija en pacientes que presentan una perdida muy importante de hueso en maxilar superior, y que de otra forma se tendrían que someterse a injertos óseo para la colocación de implantes dentales habituales
La atrofia o perdida ósea del maxilar suele ser frecuente en personas que han perdido los dientes de forma precoz y que han llevado dentadura postiza durante mucho tiempo. Los dientes son un estimulo a conservar el reborde alveolar del maxilar superior y de la mandíbula. Por otro lado las prótesis completas mucosuportadas, al apoyarse en ese reborde alveolar lo van desgastando con el paso del tiempo.En esta situaciones de atrofia ósea severa en el maxilar superior, podemos realizar injertos óseos, para reponer el hueso que se ha perdido colocando posteriormente los implantes dentales habituales, o bien podemos recurrir a los implantes cigomáticos.
Se trata de una técnica implantológica avanzada, que no se lleva a cabo en todas las clínicas implantológicas. Utilizamos implantes, que tiene una longitud de entre 35 y 55 mm, los habituales oscilan entre 8-15 mm, y siguen el recorrido lateral del seno maxilar, anclándose por su extremo superior en el hueso llamado cigomático o pómulo, y por su extremo inferior en el hueso del maxilar superior. El hueso cigomático es muy denso, y esta protegido o alejado de la cavidad oral, todas ellas son propiedades muy favorables para el anclaje de este tipo de implantes. La estabilidad inicial de los implantes cigomáticos cuando se colocan y se anclan en este hueso permiten que puedan ser sometidos a carga desde su inicio, permitiendo la colocación de la prótesis dental fija desde el primer día.
En la actualidad, los implantes cigomáticos se realizan en pacientes sin piezas dentales de forma completa o parcialmente, que presentan un maxilar superior atrófico severo, es decir, una ausencia total de hueso que impide la colocación de implantes dentales de forma habitual. Estos implantes, dada la longitud de los mismos, se colocan bajo anestesia local y sedación IV o Anestesia general de forma ambulatoria.
En pacientes con edentulismo parcial, un implante cigomático debe ir conectado a uno o dos implantes convencionales por medio de la prótesis, para conseguir una adecuada distribución de las cargas. En pacientes con edentulismo total, la colocación de dos implantes cigomáticos a nivel posterior puede asociarse a dos o cuatro implantes anteriores convencionales es lo que denominamos cigoma híbrido.
Así mismo, en casos de pérdida extrema de hueso, 4 implantes cigomáticos ,dos de ellos colocados a nivel posterior y otros 2 a nivel anterior, ofrecen unos excelentes resultados en la rehabilitación protésica fija de la arcada del maxilar superior, es lo que denominamos Cigoma cuadruple.
La colocación de estos implantes requiere de médicos especialistas maxilofaciales, con un amplio conocimiento anatómico y practica habitual en la región orbitocigomática, para conseguir los mejores resultados y evitar complicaciones.
Así podemos resumir que las dos ventajas fundamentales de esta técnica implantológica avanzada son:
Evitar la necesidad de injertos óseos en aquellos pacientes que presentan un déficit muy importante hueso y quieren someterse a tratamiento con implantes dentales para colocarse prótesis fija en el maxilar superior. Los injertos óseos prolongan el tratamiento con implantes dentales y originan molestias en el área donante.
La carga inmediata de estos implantes, permitiendo al paciente utilizar la prótesis de forma inmediata a su colocación. El paciente no está sin dientes durante ningún momento del tratamiento.